"Me encanta que los planes salgán bien".
John 'Aníbal' Smith
Es
curiosa la forma que tiene la inspiración de llegarte. Y en que extrañas
circunstancias lo hace. En el caso de Megablast, esta llegó en pleno
traslado al trabajo, cruzando un puente, mientras sonaba en el bluetooth del
coche un tema de la banda electrónica Bomb the Bass, un clasicazo del año 87
que suena a década de los 80 en cada uno de sus acordes. Y en esas estaba,
escuchando el estribillo machacón y pegadizo de la canción cuando pensé que no
estaría mal escribir un juego de rol centrado, inspirado y dedicado a esa
década que tanto marcó a mi generación. El tema se llama, por cierto, Megablast.
La idea
quedó, como tantas otras, flotando en el limbo de las ‘ideas a tener en cuenta’
hasta que llegó el señor Alan Moore y me mostró el significado de lo que él
denomina coagula o síntesis: unir en
un solo mecanismo piezas dispersas para que el todo funcione mejor que las
partes. Un buen ejemplo de este coagula lo
mostró Moore en su genial Liga de losHombres Extraordinarios. Y si eso es válido para la literatura fantástica
del siglo XIX, ¿por qué no puede ser igual de válido para el cine y las series
de acción de la década de los 80?
Asentadas
las premisas básicas de lo que debería ser el capricho que supone Megablast,
decidí que había llegado el momento de plasmarlo en papel y sin pensarlo
dos veces me decidí por el sistema Hitos: es sencillo y rápido de usar, se
puede amoldar a casi cualquier ambientación, es un sistema con licencia abierta
y, a mi entender, es mucho más estable que el otro sistema que podía haber
utilizado, FATE.
El resto
han sido muchas horas invertidas para que la idea original —que no era más que
convertir a los grandes héroes del cine y las series de acción de los años 80 en
un grupo de PJs sobre una mesa de juego— cobrase algo de sentido y permitiera
dar pie a multitud de aventuras sin más pretensión que la de pasar un buen rato
y responder a viejas fantasías que a todos nos rondaban por la cabeza: ¿y si
McClane se uniera al Equipo A para acabar con la amenaza de los Visitantes? ¿Y
si los Cazafantasmas se enfrentan a un cazador alienígena en pleno Manhattan y
tuvieran que pedir la ayuda de un experto en supervivencia como John Rambo? ¿Y
si Doc se llevara al futuro por error a Daniel Larusso en lugar de a Marty
McFly y se tuviera que mandar a MacGyver a resolver el problema? Como ya he dicho,
esto no es más que una fantasía convertida en juego de rol.
Si he conseguido
mi propósito de ofrecer un juego que desprenda amor y admiración hacia una
época y un estilo de vivir aventuras, es algo que sólo tú puedes decidir. Sólo
espero que sirva para recordaros una década en la que no había móviles, ni acceso
a Internet, ni MP3 y que muchos consideran lejana, a pesar de que estableció
las bases del mundo que vivimos y de nuestra personalidad.
Pasadlo
bien.